Tras una derrota en decisión unánime ante Dmitry Bivol que no se esperaba, el pasado 7 de mayo en la T-Mobile Arena de Las Vegas, Saúl El Canelo Álvarez no había querido darle demasiadas vueltas al asunto y tanto en sus primeras declaraciones sobre el cuadrilátero como después en rueda de prensa simplemente se limitó a decir que era consciente que no siempre se puede ganar.

El multicampeón tapatío quiso obtener una revancha inmediata ante el ruso, pero Eddie Hearn lo convenció de tomar el compromiso que había asumido para hacer la trilogía ante Gennady Golovkin en septiembre. A días nada más para que ese cara a cara suceda, Canelo sorprendió con una confesión respecto a su derrota ante Bivol que por primera vez podría no dejar muy bien parado a su entrenador Eddy Reynoso.

“No falló nada, siempre he dicho que si me ganan son mejores que yo, la verdad es que no me ganó por ser mejor, simplemente se me acabó el aire por cosas que sucedieron en el campamento, no lo dije porque la gente puede decir que son pretextos, no hago eso normalmente. Perdí y me tocó perder esa noche, pasaron muchas cosas que no debieron haber pasado, tomo eso como aprendizaje para que no vuelva a pasar, se aprende de todo”, expresó en una entrevista concedida a TUDN.

El hecho de que el tapatío no terminara de aclarar cuáles fueron esas irregularidades y problemas, que no manifestara si corresponden a la índole personal o simplemente a contratiempos durante el campamento de entrenamiento, invita a pensar que la responsabilidad podría ser también de Eddy Reynoso.

Sin ahondar en el tema, Canelo manifestó que ha hecho algunos cambios en su rutina de entrenamiento para la pelea ante Golovkin: “He tenido muchos cambios, el más significativo es empezar a trotar, no corría por mi rodilla, por las cirugías, tres veces por semana, me siento muy bien”.